martes, abril 02, 2013


Ruedas dentro de las ruedas
Seamus Heaney

I

El primer entendimiento real que tuve de las cosas
fue cuando aprendí el arte de pedalear
(con la mano) una bicicleta puesta de cabeza,
y agité su rueda trasera con increíble rapidez.
Me encantó la desaparición de los rayos,
la manera en que el espacio entre el eje y la llanta
zumbaban con transparencia. Si le arrojabas
una papa dentro, el aire de los aros
la volvía papilla y te la salpicaba en el rostro;
si lo tocabas con una paja, la paja crujía.
Algo en el modo de esas huellas de pedal
evidentemente funcionaba al principio contra ti,
y después comenzó a arrastrar tu mano hacia adelante,
hacia un nuevo impulso: todo eso me llegó
como un acceso de poder libre, como si el creer
capturara y arrojara los objetos de la creencia
en una órbita fronteriza con el anhelo.

Traducción hecha por mi. Sólo la primera parte.

🎶 let's talk about sex, baby... 🎶

Topé ésto en mis cosas de por ahí, y creo que tiene algo de lógica:


"Sex is always a risky choice. I just don't happen to believe that it's an obvious one. I think that intent and motive is what makes sex so interesting. Why do two people have sex? Okay, so they're in love. That's obvious, who cares? But are they in lust? Slightly more interesting. They're hurting over someone, they're in pain, trying to forget someone, they're in denial, looking for a distraction... All of a sudden, sex has just become very interesting, and not the obvious choice at all".

"El sexo siempre es una opción arriesgada, pero yo no creo que sea la más obvia. Creo que la intención y el motivo son lo que vuelven al sexo tan interesante. ¿Por qué tienen sexo dos personas? Están enamoradas, qué bien. Es lo obvio, ¿a quién le importa eso? Y ¿sienten lujuria? Es un poco más interesante. Fueron heridos por alguien, sienten dolor, tratan de olvidar a alguien, están en negación, buscan distraerse... De repente, el sexo se volvió de lo más interesante y dejó de ser la opción más obvia."

¿Qué podría orillar a una persona a tener sexo casual? ¿A tener sexo? ¿Qué razones podría tener alguien para no tenerlo en todo caso, y en su lugar buscar todo el numerito para compensar otras cosas que faltan en sus vidas?

Intención y motivo para asumir un riesgo. Varios riesgos, debería decir. A veces éstos valen la pena, a veces no. La gente, con su libre albedrío (porque vaya, todos lo tenemos, quiero creer), decide qué hacer o no, y sabe de antemano las consecuencias de sus actos. El problema viene, claro, cuando no se afrontan las consecuencias de los mismos.

Hace un tiempo me puse a pensar en si había o no experimentado lo suficiente, y si en verdad eso era importante para mí, o si me iba a poner a buscar para cumplir con una cuota que me hiciera sentir menos insatisfecha conmigo misma. De lo que pude rescatar entre el tiempo que lo hice y ahora, es que la diferencia es abismal y muy notable cuando la persona con la que estás solo busca su satisfacción, sin importar cuánto tiempo pase.

La primera vez que estuve con alguien, lejos de que se preocupara por mi bienestar o porque me sintiera segura con él (en todo aspecto quiero decir), me tumbó en una cama como por media hora y se puso a 'limpiar' con papel de baño un área de mi cuerpo que según él, era importante por no sé qué razón. Inexperta como era, me dejé. Sobra decir que fue la situación más dolorosa e incómoda de mi vida y que mucho me hubiera ahorrado si desde esa vez lo hubiera mandado a la fregada, pero no. El amor es ciego y tonto muchas veces.

Las situaciones afortunadamente, mejoraron, y por cada patanada que me hizo este sujeto, (proponer un intercambio de parejas con gente que yo conocía, tener sexo y botarme al otro día, ponerme el cuerno y una lista de varios etcéteras) me tocó vivir algo bueno con alguien más. 

Cuando estás en el lugar correcto en el ambiente ideal, no hay barrera que se interponga, así sea por una noche, una semana o solo platicar a kilómetros de distancia en ocasiones después del encuentro. Después de todo, ¿cuántas veces te pasa? La pasas bien en el bar, te entiendes con alguien que quiere lo mismo que tú, tienen química.

Después de un tiempo, lo casual y contrastante:
Por un lado estuvieron los riesgos con quien nunca asumió sus responsabilidades, echándome la culpa de todo, aunque fue algo que ambos hicimos. Entendible, mas no justificable. Estaba muy cerca de casarse, le cacharon conversaciones en facebook y tuvo que decir lo que ella quiso escuchar. 

Por otro lado está con quien en serio fueron todos los puntos mencionados en el texto de aquí arriba: la atracción y la lujuria, combinadas con saber nada de él, pasar por un mal momento, sentirme sola y no querer o poder hablar con nadie (o al menos no sentir como que podía hacerlo). La familiaridad con la que me sentí, y al mismo tiempo la combinación entre rudeza y atención hacia conmigo lo hicieron una de las mejores noches que he pasado (claro, sin contar que no sabía que iba a acabar ahí, y el sustote que le metí a mis papás).

Tener sexo con amor es de las experiencias más hermosas y placenteras que puede haber gracias a la sensación de seguridad y el vínculo que une a las dos personas que lo practican. (oh, sí... ya la perdimos. Vamos, díganlo). Conservar ese lazo después de cierto tiempo es lo difícil... es por lo que se debe trabajar siempre, pero debemos recordar que es trabajo de dos personas. Si me preguntan, me quedo con esta última experiencia porque no es solo el físico, siempre habrá atracción, siempre habrá confianza. Claro que es difícil hallar a quien te llene, pero cuando le hallas...

¡...cuando le hallas!

bookends, or so.

Ayer salí con mi ex. Otra vez. Como suelo hacer desde hace meses después de que me mandó al carajo en un cuarto de hotel. Pero algo cambi...